Película dirigida por Paul Haggis, realizador de la oscarizada Crash pero reconocido sobre todo por ser un gran guionista. Suyos son los libretos de Million Dollar Baby y Casino Royale entre otros. En esta película su estilo no llega a ser tan crudo como en muchos momentos de Crash, pero sí se deja notar de vez en cuando en algunas escenas de acción. Estos momentos están rodados a la perfección y se nota que sabe exactamente lo que quiere mostrar y lo que no. No hay planos de relleno, solo los estrictamente necesarios, cosa que se agradece. En cuanto a las escenas menos moviditas simplemente utiliza los planos adecuados sin experimentar ni complicarse la vida. Consigue así centrar la atención plenamente en la historia que está contando.
La película, remake de la francesa Pour Elle, se centra en John Brennan, profesor de instituto que ve como cambia su vida cuando su mujer es acusada de asesinato y tiene que encargarse de su hijo. A los dos años de juicios toda opción de libertad para Lara Brennan parece esfumarse. Las pruebas le señalan y la última apelación es desestimada por lo que pasará los siguiente veinte años entre rejas. Luke, el niño de cinco años, no quiere ver a su madre y la familia empieza a dudar de su inocencia. Todos menos su marido que, desesperado, empieza a planear un intento de fuga. Contactando con un famoso y huidizo ex presidiario, toma buena nota de sus consejos y empieza a realizar las tareas que le encomienda. Centra su atención sobre todo en cómo salir del país y como ocultarse después. Conseguir documentación falsa para él, su mujer y el niño es la prioridad principal. El dinero es algo en lo que también debería prestar atención por eso decide vender la casa y tenerlo todo en efectivo para cuando ejecute su plan. Pero, como no podía ser de otra manera, las cosas se van complicando…
Russell Crowe interpreta de manera precisa al marido chanchullero y Elizabeth Banks aparca momentáneamente la comedia para verse implicada en este thriller. Ty Simpkins es el pequeño Luke y Olivia Wilde es la vecina que pasaba por allí y que, pese a no tener peso argumental, su escena está muy bien porque es muy guapa. Liam Neeson también sale rozando el cameo como el experto en fugas.
Hay algunos elementos extraños a lo largo de la película. La escena inicial del arresto es algo confusa ya que además de dos o tres gritos, no parecen estar muy sorprendidos por el arresto de la mujer por un asesinato. Además, pese a centrarse en un hombre desesperado por liberar a su mujer, Crowe tampoco muestra una gran preocupación y a veces parece que lo hace todo un poco por inercia. Hay además dos personajes, unos detectives que investigan el caso, que aparecen al margen de la historia principal en un par de ocasiones y que dan a entender que se abre una trama paralela que al final no existe. Un poco raro. Por otro lado aviso a los fans de las pelis de acción que, pese al cartel y la publicidad, esta no lo es. Hay grandes escenas de acción pero solo al final de la película. Realmente el peso argumental lo tiene la preparación en sí del plan de fuga.
La escena que más me cautivó fue una de las que muestran algo de acción. Perseguidos por el cronómetro, la tensión aumenta entre los dos protagonistas y no pudiendo mas por la presión, la mujer decide tirarse del coche en marcha. Lo que sucede después es mejor que lo veáis en la pantalla grande. La escena es realmente impresionante.
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